Sometido a presión.

El mundo real es vasto, y es por eso que el ser que todavía vive en lo limitado no puede comprenderlo. Por lo tanto, la gente concibe el sol debido a la luz y el calor que emana de él; pero lo que realmente es, no lo saben. Algunos científicos dicen que el sol es un en cuerpo ardiente cuya la temperatura 5.000 grados; otros afirman que puede alcanzar los 45 millones de grados. Pero ninguno de ellos fue a comprobar la exactitud de estas afirmaciones.

Todo hombre sabe que el sol dispensa luz y calor. Y el calor es más o menos fuerte dependiendo del ángulo bajo el cual los rayos del sol llegan a la superficie de la tierra. En regiones con temperatura moderada vive la mayor parte de la humanidad. La temperatura del cuerpo humano está a37 grados, y si aumenta sólo en 3 o 4 grados, el hombre va al otro mundo. Pero algunos microbios pueden soportar una temperatura de 120 grados y otros soportan 500 grados de calor.

Hemos dicho que, según los científicos, el sol es un cuerpo en llamas, la tierra una masa sólida y oscura, cuya superficie está iluminada por los rayos del sol y cuyo interior es incandescente. La parte sólida del área de la tierra es el resultado de la presión a la que se la somete. Y, por analogía, podemos deducir que la dureza del carácter y la psique de ciertos seres proviene de la misma causa: al igual que la tierra, están bajo la influencia de una gran presión. A menudo, en la naturaleza se producen grandes depresiones y los seres humanos se sienten fuertemente indispuestos. Tan pronto como la depresión cesa, su indisposición desaparece. En la Vida psíquica del hombre, también existen las depresiones.

Por ejemplo, cada sentimiento mal entendido causa un impacto en el corazón, cada pensamiento negativo, una sombra en la mente. Pero si el hombre logra aclararse, inmediatamente experimenta una cierta alegría, una liberación, que le traen paz y calma interior.

Pensamientos claros, sentimientos dulces y armoniosos representan, en el mundo divino, frutos de los cuales el espíritu del hombre se alimenta; por falta de este alimento, se debilita y se vuelve impotente, al igual que el cuerpo humano, carente de alimentos, se adelgaza y se marchita, y pierde su buena disposición y belleza.

Beinsa Douno.

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