Caminar por el camino claro de la vida donde arde el fuego, donde fluye el agua, donde el aire acaricia, donde crece la hierba, donde el pez nada, donde vuela el pájaro, donde el hombre piensa, donde el espíritu traza el futuro y donde reina la verdad.
Abre los ojos cuando la virtud sonríe.
Escucha cuando la verdad hable.
Trabaja cuando el espíritu y la sabiduría tracen destinos.
Pensamientos luminosos, un corazón puro, un alma elevada y vasta, un espíritu fuerte son amigos para el hombre.
Escucha las instrucciones de tu espíritu y el consejo de tu alma para que siempre estés satisfecho.
Un camino sin luz, una casa sin puerta, un río sin agua son cosas sin de sentido. En el camino de la vida, es la fe y la esperanza del hombre lo que se pone a prueba.
En el camino del conocimiento, esta es la razón
y la voluntad del hombre que es puesto a prueba.
La piedra permanece donde un pequeño grano de arena no puede. El pequeño grano de arena permanece donde la piedra no puede.
El invierno llega cuando caen las hojas del árbol de la vida.
Se acerca la primavera
cuando aparecen las hojas del árbol de la vida.
Cuando la pobreza llama a la puerta, le el frío entra. Cuando la riqueza llama a la puerta, el calor entra.
La incertidumbre aparece, cuando el hombre testarudo reina.
La paz abunda cuando los sabios reinan. El tonto escucha sólo con un oído, el hombre inteligente escucha con ambos oídos, el sordo escucha no escucha con ningún oído.
No arruines lo que la naturaleza ha arreglado.
Beinsa Douno.