A todas las edades de la vida, un pensamiento fundamental te dirige y te ayuda. Síguela con impulso.
Aquí un ejemplo que te mostrará lo que es lo Divino.
Una pobre huérfana que amaba la música se enteró de que un gran virtuoso del violín estaba dando un concierto en su ciudad. Le hubiera gustado oírlo, pero no podía permitirse ir a un lugar demasiado caro para ella y no podía encontrar a nadie que pudiera ayudarla. Sin embargo, impulsada por su gran deseo de escucharlo, fue a la puerta de la sala de audiencias y esperó. Cuando el concierto terminó, el violinista encontró a huerfanita allí con las lágrimas en los ojos. Le preguntó la razón de su llanto. «Vine a oírte tocar tu hermosa música, pero no tenía dinero para pagar la entrada. El músico tomó la dirección de la chica, fue allí al día siguiente y dio un concierto para ella, especialmente.
Sabed que si también tenéis este gran impulso hacia lo Divino, este gran deseo de todo vuestro ser, el gran violinista, el Virtuoso Eterno también vendrá a vosotros y os hará escuchar la majestuosa sinfonía de la vida real.
«Sólo el amor de Dios da la plenitud de la vida.»
El bien es la base de la nueva vida y su práctica te liberará de todas las contradicciones. Todos esperan que la vida mejore. El mundo está mejorando en efecto. El mal será desarmado, ya está perdiendo fuerza. El bien viene y vencerá, porque está de acuerdo con la radiación de la sublime conciencia cósmica.
Todo el mundo puede notar que el polvo envejece los objetos que están impregnados de él, ya sean las cortinas o la ropa. También envejece al hombre. Los viejos hábitos, los recuerdos de las cosas pasadas son el polvo que te hace envejecer.
Para limpiar las alfombras, las cortinas, la ropa, hay que golpearlas, agitarlas, cepillarlas. Lo mismo es para los humanos. La naturaleza viva a veces te “repasa” con una esponja y un cepillo, te hace pasar por sacudidas dolorosas, y dificultades de todo tipo, con el fin de deshacerse de todo lo que es viejo en ti y permitirte rejuvenecer.
Sufres porque no sabes que la naturaleza sabia te ha establecido para nuevas posibilidades. Si guardas la paz, la fe, durante estos cambios y dificultades, tendrás la alegría de sentir que estás saliendo renovado tanto en cuerpo como en mente.
Todo el mundo tiende hacia la juventud porque trae nuevas condiciones de vida. Así que no te arrepientas por tus viejos hábitos, por las sacudidas y los golpes que te quitan el polvo de tu ser, pero hazlo tú mismo, voluntariamente, tanto como te sea posible, con amor, fe y alegría. Esto te ahorrará un montón de sacudidas innecesarias.
Comienza una nueva vida, pero todo lo que es viejo primero debe ser rechazado para ser reemplazado. Se les ofrecen las condiciones para esta nueva de vida, pero de su lado deben renunciar a las viejas riquezas, a los valores obsoletos de los siglos pasados. Hoy, en el camino de la conciencia collectiva, consciente necesitamos riquezas más reales y más estables, las riquezas se adquieren sólo en la renuncia completa de lo viejo, reconociendo lo viejo que hay en nosotros.
Beinsa Douno.