La tierra es el lugar donde…

La tierra es el lugar donde se dan las preciosas lecciones que los seres humanos deben aprender. El mundo invisible es el lugar del examen; aquí es donde juzgamos si el hombre ha estado activo, aplicado a su trabajo de autoeducación y su desarrollo. Para aquellos que aún no se encuentran preparados, obtendrán un diploma que estará inscrito lo siguiente:

«Aquí hay un estudiante al que le gusta caminar, no estudiar». Al mismo tiempo, se le dará un billete de regreso a la tierra; en un nuevo cuerpo físico, tendrá que aprender mejor y aplicarse mejor. Deseo que todos ustedes sean discípulos a los que les gusta estar al estudio de la vida verdadera; deseo que aprueben sus exámenes y que el mundo invisible escriba en su certificado: «Estos son discípulos que siempre han trabajado bien y han aprendido bien sus lecciones. Han completado la escuela de su vida en la tierra con su actitud de estudiar cada momento».

«Por esto, el mundo sabrá que sois mis discípulos, si tenéis amor entre vosotros.» Es decir: «Estudia, trabaja, perfecciónate. Estimulen en el bien, en la Luz Divina, en el desarrollo preciso de su inteligencia, de su corazón, de su fuerza y entonces Dios los bendecirá.»

El mundo tiene necesidad de trabajadores buenos, inteligentes y fuertes que estén dispuestos a decir: «De ahora en adelante, trabajaremos para bien, para Dios. Estamos listos para trabajar con Amor, Sabiduría y Verdad Divina para toda la humanidad». Que todos digan en sí mismos: «Señor, así como los Seres razonables trabajan en el cielo, yo también quiero hacer lo mismo en la tierra. Y de nuevo: «Señor, te agradezco por rejuvenecerme, para que pueda trabajar por Tu nombre y para Tu gloria.»

Beinsa Douno.

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