Esta mañana subimos al solitario pico de la montaña. Hicimos nuestros ejercicios matutinos en un área libre y rodeada de piedras. El Sol envolvía la Tierra con una alegre luz, entibiando las piedras, y cubriendo todo con su brillo. Durante nuestra conversación surgió una pregunta acerca del verdadero ser humano.
El Maestro dijo:
Existe un Mundo que ustedes no pueden ver. Es necesario que sus ojos se abran para que puedan percibirlo. Ustedes son una sombra de ese Mundo. Ustedes, que son su sombra, deben creer que existe un Mundo Real del cual ustedes provienen. Ustedes son solamente una proyección de esa Realidad. Hay una Luz interior en el ser humano. Esta Luz es el Origen Divino que espera a que llegue el momento indicado para despertar. Los seres humanos son más que sus mentes, su corazón y su voluntad. Estos son sólo servidores del espíritu humano. Los seres humanos, en su origen, en su esencia, son algo grande.
Si ustedes aman a las personas, si ustedes creen en ellas, y no creen solamente en lo que manifiestan exteriormente, ustedes podrán ver cuan grande es el ser humano. Ustedes dicen: “Las personas son seres pensantes”. Pero las personas son más que sus pensamientos. Las personas no son sus pensamientos, sus sentimientos o sus acciones. El ser humano es Divino. Dentro de ustedes están escondidas todas las cosas necesarias para desarrollar una vida de altos principios. Todo aquello que ustedes han perdido, será encontrado. ¿Cuándo? Cuando se den cuenta que Dios ha sembrado riquezas incontables dentro de ustedes. Todas las posibilidades existen para que una persona sea un artista, un poeta, un científico y todo lo demás. La. malicia está solo en la superficie de las personas. Es algo externo. Lo Divino dentro de los seres humanos no puede ser vencido. No importa porque pruebas pase una persona, al fin regresara a su estado original.
Cuando alguien les obsequia una piedra preciosa, cuidadosamente envuelta y colocada en una caja, lo primero que ustedes hacen es abrir la caja, liberar la piedra de sus envolturas y observarla cuidadosamente, evaluando su valor. Lo Divino dentro de las personas es una piedra preciosa que ustedes deben extraer de sus envolturas.
¡Confíen en lo Divino dentro de ustedes! Lo único dentro de nosotros que es genuino es lo Divino. Es eterno e incambiable. Aquellos que desean evolucionar correctamente deben aceptar la existencia de la Causa Divina dentro de ellos como un axioma. Con Su asistencia ustedes pueden desarrollar sus talentos y habilidades.
Confíen en lo Divino dentro de los demás. Sobre esta roca ustedes construirán su gran futuro. Las personas solo pueden manifestarse en su totalidad cuando se dan cuenta que Dios habita dentro de ellos y dentro de sus semejantes. ¿No sería hermoso poder percibir el Mundo Sublime dentro de vuestros semejantes? Cuando todos están convencidos de que lo Divino habita en los demás, solo entonces las correctas relaciones entre las personas reinaran supremas.
Beinsa Douno.